Cantarena en sus inicios se inspiró en  la filosofía educativa de las escuelas Municipales de Reggio Emilia que valora a cada niño como un ser único, competente y lleno de lenguajes. Un niño(a) constructor de conocimientos, identidad y cultura.

 

Hoy, con 15 años de experiencia nuestra identidad se ha ido construyendo desde el trabajo directo con los niños y niñas de Cantarena y la profunda reflexión sobre nuestro quehacer pedagógico.

 

Así, hoy creemos que:

 

>  El aprendizaje es un proceso activo que tiene sentido y se hace propio en la medida que las experiencias propuestas surjan de los intereses de los niños y niñas.

>  El educador es compañero en los procesos de aprendizaje. En Cantarena los educadores estamos en constante capacitación y reflexión de nuestro que hacer pedagógico. A partir de nuestras fortalezas individuales y como equipo nuestro rol es estar en permanente reflexión y acción sobre los niños(as) y sus experiencias e intereses, enriqueciendo así nuestro proyecto educativo en Cantarena.

>  El espacio y los ambientes son fundamentales. Propiciamos espacios y experiencias donde los niños y niñas, junto a nosotros como educadores, nos desafiemos cognitivamente, sensorialmente y socialmente a partir del juego.

>  El conocimiento se construye con otros. El preguntares, el formular ideas, modificarlas y ponerlas en común con los demás ayuda a cada niño en la construcción del pensamiento y la identidad personal.

>  El propiciar un ambiente cuidado, que asombra, donde hay materiales y lenguajes diversos, favorece a que el proceso de construcción del pensamiento sea dinámico y desde la individualidad.